Antonio cuenta su etapa ibicenca que comenzó en 1970.
Yo asistí a los conciertos de música en vivo. Y le recuerdo con su larga melena.
Me pasaron el micro y le pregunté, en pantalla, qué le pareció el cambio de AMNESIA con música en vivo a discoteca, que yo inauguré en 1978. El cambio no le gustó.
Para la inauguración fui a Nueva York a comprar discos de vinilo. Y se bailaba de maravilla con música hecha por músicos, espacio al aire libre, y sin exceso de decibelios.
Mi invitada de honor fue Ursula Andress, que llegó acompañada por Smilja Mihailovitch.
Varios asistentes le hicieron preguntas en pantalla y, entre ellos, su exsocio y amigo Manolo Saenz de Heredia.
Escohotado habló mucho de sexo, libertad y drogas. Y no precisamente de caramelos...
Recuerdo un comentario que hizo Antonio en una cena en Sunset Ashram, de Manel Aragonés:
"El bombardeo de chunta-chunta, es una abominación nacida de combinar pastilleo con decibelios, que permite mover el antebrazo como si fuesen los pies y la cintura, ofreciendo el último testimonio de júbilo acorde con masificación".
VANITY FAIR publicó una foto de mi Fiesta de Blanco, en la discoteca Lola's de 1970, con dos amigas que son personajes de mi novela "Réquiem por Peter Pan en Ibiza".
Jacqueline fue nominada varias veces "Mujer más elegante del Mundo".
Ahora Jacqueline se ha trasladado de París a Suiza, y la llamé para felicitarla.
Recomiendo ver la exposición de fotos "Tierra de sueños", de Cristina García Rodero, en Vara de Rey.
Me impresionó la celebración de la menstruación de una niña de 10 años, que ya podían casarla.
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