En tierra avisan de mi llegada, y siempre encuentro un detalle en el camarote. El regreso de Ibiza a Barcelona fue con mucho oleaje.
Fui invitado al desfile de la marca Marchesa, de las diseñadoras Georgina Chapman y Karen Craig, en el Palacio de Pedralbes, en la Valmont Barcelona Bridal Fashion Week.
Allí saludé a Juan Avellaneda, Irene Montalá y Mar Flores.
Juana Acosta, Laura Ponte y su acompañante, en el jardín de Pedralbes.
Esta firma se hizo famosa gracias a Jennifer López, Penelope Cruz, Anne Hataway y Scarlett Johansson, entre otras.
La marca Marchesa pasó un mal momento cuando el productor Harvey Weinstein, marido de la diseñadora Georgina Chapman,
fue denunciado por acoso sexual.
El estilo de Marchesa es romántico y muy femenino, según las propias diseñadoras.
En este desfile, Karen y Georgina presentaron la Mini Collection de Marchesa Notte, para niñas de entre 2 y 10 años.
Después del desfile se sirvió un cóctel-cena en los salones del palacio.
Rosa Clará me envió esta invitación.
El desfile tuvo lugar en La Llotja del Mar, que me trajo recuerdos de un gran evento que organicé para Cartier.
Los trajes de novia me gustan muy clásicos.
Pero hoy día hay que pensar en novias que no se casan en iglesias.
Me gusta todo lo que me recuerda a la Alta Costura.
Bordados, encajes, pedrerías y velos.
Los diseños de Rosa Clará son siempre elegantes.
La colección 2020 gustó mucho al numeroso público internacional.
El desfile tuvo lugar a las 13 horas. Y por la noche se ofreció un cóctel-cena, de nuevo en La Llotja del Mar.
A las 9 de la noche, regresé a la Llotja donde el Chef Nando Jubany sirvió un muy buen cóctel-cena a los invitados.
Felicité a Rosa, a quien conozco desde hace muchos años. Me gusta mucho su trabajo.
Me gustó mucho la entrevista que grabaron en la Cope, sobre Woodstock, y la época hippy de Ibiza, que se emitirá muy pronto para toda España.
Me hicieron contar historias de mi primera novela, cuya traducción al inglés se está ya acabando.
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