Roman había comprado una casa en la isla, y organicé una cena, en el ya desaparecido restaurante El Domingo, para presentarle al grupo más interesante y divertido de los asiduos de Ibiza.

Yo entonces vivía en una casa de campo en San Carlos con Silvia Alexandrowitch, a la izquierda de Roman en la foto.

La tarde en que yo estaba organizando las mesas y la decoración para la cena en El Domingo, que estaba situado bajo la antigua muralla de Dalt Vila, un hombre se suicidó precipitándose desde lo alto de la muralla, y cayéndo a tan solo tres metros de la terraza del restaurante.

¡Flipé por un tubo!, como se dice vulgarmente.
Parece que Roman atrae la tragedia como un imán. Pues, a los pocos meses, en un bar de Ibiza, el filipino que trabajaba en casa de Polanski, al defender a su hijo al que estaban pegando, mató a un hombre de un certero cuchillazo.
Varios años después, tras cumplir su condena, yo contraté al filipino, a su esposa y a su hijo para ayudarme cuando daba cenas en mi casa de San Carlos.

Tras vender su casa en Ibiza, Roman nunca regresó a la isla. Además, su íntimo amigo en Ibiza, el ex-futbolista de la Real Sociedad y copropietario de la discoteca KU (hoy Privilege), José Antonio Santamaria había sido asesinado a manos de ETA, de un tiro en la nuca.
Cuando organicé, en Barcelona, la cena de gala para la entrega de los Premios Magníficos, invité a Roman para que hiciese entrega de uno de ellos. Esa noche, junto a Roman, también subieron al escenario, para hacer entrega de los galardones, la Princesa Tessa de Baviera, el actor Terence Stamp, la Duquesa de Feria y Amanda Lear.

En el 2002 felicité a Roman por su fantástica película "El pianista", ganadora de un Oscar.

Yo soy un fan del cine de Roman Polanski. Y considero que "Repulsión", "La semilla del diablo", "El baile de los vampiros", o "Lunas de hiel" son verdaderas obras maestras.
No hace mucho visité a Roman y a su esposa, la actriz Emmanuelle Seigner, en su casa de la Avenida Montaigne, de París.

Estos días, el nombre de Roman está de nuevo en todos los medios informativos del planeta, pues ha sido detenido en Zurich.

Polanski fue denunciado hace 32 años por abusar de una modelo de 13 años, llamada Samantha Geimer, que puede verse en esta foto.


En esta foto, Roman está junto a su abogado, cuando fue detenido en California, en 1977. Roman escapó a Europa y no regresó nunca más a los Estados Unidos, ni para recoger su tercer Oscar por "El pianista".

Los años han pasado. Roman tiene 76 años y Samantha Geimer, que vive en Hawai con sus tres hijos, tiene 45.

Yo cené, en una ocasión, con Jack Nicholson en casa de Michael Douglas, en Mallorca, y me pareció ser el personaje de la célebre película "Alguien voló sobre el nido del cuco".


Creo que ese fue el caso de Roman Polanski. Lo que no le exime de haberse aprovechado de la situación.
Lo raro es que, teniendo un chalet en Gstaad, donde Roman pasa largas temporadas, hayan tardado tantos años en detenerle. Ya que tanto Gstaad como Zurich están en Suiza, donde hay un convenio de extradición con los Estados Unidos.

Hay un refrán catalán, que traducido diría: "Si no quieres polvo, no vayas a la era".
Fotos: via Flickr, Carlos Martorell, Sylvia Polakov.