miércoles, 29 de abril de 2020

¿CÓMO SERÁ ESTE VERANO EN IBIZA Y EN MÁS LUGARES?


Eso decía la prensa el año pasado... ¡Qué poco nos imaginabamos lo que iba a ocurrir!
Todo lo que ha perdido la Economía lo ha ganado la Naturaleza. 
A mi siempre me han horrorizado las playas abarrotadas de gente, con aguas llenas de orines, sudor y cremas solares.
 ¿Qué cosas nos exigirán cuando estemos desconfinados este verano?
Tendrán que desifectar las hamacas de los chiringuitos, ahora llamados "Beach Clubs", porque todos tienen DJ.
¿Nos exigirán un atuendo especial?
¿Tendremos que mantener una distancia de dos metros?
¿Nos encerrarán en jaulas de cristal?
 ¿Qué distancia exigirán en las macrodiscotecas, con aforos de miles de personas?
¿Volveremos a bailar con mucho espacio, como en los años 70 y 80?
Seguro que se acabarán los apretujones de personas que solo levantan un brazo, y miran al DJ, como si fuese el Papa de Roma.
Como en años pasados no había edificios junto a las discotecas, se podía bailar en zonas al aire libre, y sin ese espantoso exceso de decibelios.
Uno de esos nuevos ricos horteras organizó una fiesta en su casa. Por suerte le falló bastante gente.
Fue tan tonto que, además de pagar a un catering, contrató a un DJ. Y la música molestó a varias casas vecinas, que le denunciaron.
Cuando nos quejemos de lo mal que estamos confinados en nuestras casas, sean grandes o pequeñas, pensemos en personas como Manuel, que lleva 45 días viviéndo en un coche, en Ibiza.
Yo tomo cada día el sol, en traje de baño, en mi terraza.
Cuando en entrevistas me preguntan qué es para mi el lujo en Ibiza, yo respondo: "El silencio y el espacio".
Muchos hoteleros españoles temen que, de abrir sus hoteles, tendrían muy pocos clientes, y solo de turismo español.
 Yo tengo muchas ganas de ir a bañarme a Formentera.
Yo me paso muchas horas viéndo películas, series, telediarios y enviándo y recibiendo cientos de Whatsapps. Pero no soy el único...
El Coronavirus me está sirviéndo para medir los afectos. En el confinamiento, me doy cuenta de las personas que realmente me quieren y me aprecian. 
Paquita Sánchez me trajo a casa productos de su huerto, huevos de sus gallinas, un buen guiso y mucho más.¡Gracias!
¡Que podamos abrazarnos pronto, y sin guantes ni mascarillas!

No hay comentarios: