martes, 10 de marzo de 2009

DOS TORPEZAS DEL GOBIERNO CATALÁN


NERÓN ROJO para: 1/ la Ley del Cine en Cataluña 2/ Una campaña en TV.

Mientras la crísis nos corróe y el paro es imparable, los políticos de la Generalitat de Catalunya se gastan inadecuadamente el dinero público en temas lingüísticos.

Un anuncio televisivo nos dice que tenemos que dirigirnos a los inmigrantes siempre en catalán. ¡Bravo! Yo les propongo otro anuncio en la televisión, interpretado por Toni Albà, como un Carod Rovira amenazánte: "Habla en catalán o ya me entiendes...".

A este pobre inmigrante africano lo enterraron en un nicho muy cutre. No sabía hablar ni su propio idioma y, durante un nefasto viaje en kayuco, le comunicaron que tenía que hablar, por narices, en catalán y no lo pudo resistir.

Incluso el programa cómico "Polonia" de TV3, la televisión autonómica catalana, se ha burlado, y con mucha gracia, de esta iniciativa de la Generalitat, en un sketch en el que se ridiculiza al Presidente Montilla, que obliga a un camarero inmigrante a hablar en catalán.

El actor Sergi Mas, que interpreta a Montilla, en "Polonia", no necesita maquillaje. Es calcado.

Pero esto no es todo. A nuestros políticos les sobra el tiempo, como si estuviesen en el paro, y tras devanarse los sesos, pretenden crear una Ley del Cine, que obligue a que el 50% de las películas que se exhíban en Cataluña sean traducidas al catalán. ¡Bravo!
En vez de concentrar todas las energías para superar la crísis, pierden su tiempo y nuestro dinero en temas lingüísticos, que no son prioritarios en estos difíciles tiempos.

El ex-Conseller Pujals ya lo intentó, en 1998, decretando la traducción del 25% de la cuota de pantalla, y fracasó estrepitosamente. Alguien dijo: "El Decreto ha sido asesinado por la realidad".

Ahora, el Conseller de Cultura Joan Manel Tresserras (de Esquerra Republicana) afirma que: "Cataluña se ofrece a las grandes productoras como laboratorio privilegiado para que puedan ensayar su posición en el futuro. Porque el negocio del cine cambiará radicalmente en muy pocos años y, si quieren ser egemónicos en un entorno global, tendrán que aprender a tratar con mercados cada vez más flexibles y más multilíngües". ¡Todo un profeta!

Los empresarios de salas privadas y las grandes productoras están en pie de guerra. Y ponen como ejemplo la película de Woody Allen, "Vicky, Cristina, Barcelona" que, a pesar de exhibirse en muchas salas en catalán, solo un 20% de los catalanes quisieron verla doblada en su lengua materna.

En un post de este Blog, titulado: "El catalán, los jóvenes y el trabajo" (puede verse haciendo un clic en mis posts del 2008, lunes 23 de junio), yo transcribí unas líneas de los periódicos La Vanguardia, y el Avui, en las que se decía que la primera generación obligada a estudiar desde niños en catalán, unos jóvenes que tienen ahora 15 años, se quejan de que, a la hora de buscar trabajo, es preferible el castellano y el inglés, al catalán.

Son datos del "Estudio sociodemográfico y lingüístico del alumnado de 4º de Eso de Cataluña".

Me decía un taxista enfurecido: "Los políticos creen que sus fobias tienen que ser las fobias de todos. Cataluña va a menos cada día, y es cada vez menos competitiva. Y han conseguido que la palabra catalán resulte antipática a muchos españoles e inmigrantes".

Tal como escribí en ese post del 2008, yo fui detenido en una manifestación estudiantil contra las medidas represivas de Franco, y pagué una multa importante.

¡Qué gran error hizo Franco con el tema lingüístico! Ahora, casi medio siglo después, están haciendo algo parecido: cohartar las libertades.

He dado la vuelta al mundo y he trabajado en países extranjeros, gracias a que hablo 5 idiomas y, por supuesto, también el catalán. Y doy gracias de no haber sido un párvulo obligado, por collons, a estudiar en catalán. Una lengua muy digna y que no debe olvidarse, pero del todo obsoleta para competir en el mundo actual globalizado. Ojalá se hablase el catalán en el mundo entero. Pero lamentablemente no es así. Soy barcelonés y no me gusta lo que le están haciendo a Cataluña. Somos cada vez más pueblerinos, y ya no somos un referente.
Mi opinión puede resultar desagradable para muchos, pero estoy acostumbrado a que se me dé la razón con 15 años de retraso.

Este post puede leerse también en HOLA.com (en Blogs. El mundo de Carlos Martorell).

Fotos via flicker: novia, xavier fargas, polonia tv3, jaume d'urgell, EFE, southharvey.

10 comentarios:

Merche Pallarés dijo...

Te doy toda la razón ¡qué manía con el euskera, catalán, gallego! Vale, me parece muy bien y pienso que estos idiomas se debieran aprender en el resto del estado porque tambien son lenguas del país pero hacerlas obligatorias en sus respectivas autonomías, dejando de lado el castellano, me parece suicida. Porque si salen de sus terruños, nadie habla sus idiomas. Y ¡aún el catalán y el gallego se entienden! pero el euskera... Besotes, M.

FERNANDOG dijo...

Que razón tienes cuando dices que Franco cometió un grave error al prohibir el catalán. Tal vez, de haber hecho lo contrario, hoy quienes actuan como talibanes de la lengua catalana serían defensores empedernidos del castellano, solo por el hecho de ir contra cualquier iniciativa franquista.
Aunque debo decirte que, en Mallorca, y siendo yo de la generación del 60, jamás percibí represión alguna por el mallorquín como la padece ahora el castellano, incluso en las Baleares, en donde poco a poco se pretende eliminar el mallorquín, menorquín, Ibicenco y Formenterense. En los colegios es lo que está ocurriendo sin ir más lejos.
También hay otro factor determinante en todo este asunto, y es el maldito dinero. El catalán, en muchos aspectos, se ha convertido en un medio de vida y un sacacuartos a las administraciones para financiar organizaciones afines a todo esto.
Hoy por hoy hay un montón de gente que vive a la sombra de la imposición del catalán.

Mientras tanto, yo absurdamente tengo que pagar a mis hijas dos colegios:uno el que pago con mis propios impuestos y que me corresponde por ley (totalmente catalanizado)y al que, evidentemente he tenido que renunciar, y otro (al que realmente asisten),en el que acceden a una enseñanza más equilibrada desde el punto de vista lingüístico.Lo que coloquialmente conocemos como "colegio de pago".
Peor es el caso de quien no puede elegir.

En fin, Carlos, creo que estos nacionalismos trasnochados deben superarse cuanto antes, y sobre todo, en el siglo que estamos, evitar hipotecar la formación de las generaciones venideras.De no ser así, lo pagaremos caro.

Un abrazo.

FernandoG

P.D Por cierto, creo que el Presidente de la Generalidad, Montilla, lleva a sus hijas a un elitista colegio alemán en Barcelona. Fenomenal!!!

Carlos Martorell dijo...

Merche:
Tu que vives en Ibiza, sabes lo importante que son los idiomas para una isla que solo vive del turismo.
Un abrazo!

Carlos Martorell dijo...

Fernando G: Tienes razón. Lleva a las niñas a un colegio alemán. Y la Infanta Cristina, que vive en Barcelona, los lleva a un colegio francés.Un abrazo.

Anónimo dijo...

ESTOY INDIGANADO y lo grito así, con mayúsculas para que suene a indignación en un blog que no es lo correcto.

Del tiempo de Franco prefiero pasarlo como algo de la prehistoria y por lo tanto incomparable con las imposiciones de los "mandarines" autonómicos en pleno siglo XXI y en una aparente democracia más parecida a la actual de Venezuela, Bolivia y otros países que prefiero obviar porque este post sería enciclopédico.

MERCHE, querida y admirada amiga:

"Vale, me parece muy bien y pienso que estos idiomas se debieran aprender en el resto del estado porque también son lenguas del país pero hacerlas obligatorias en sus respectivas autonomías, dejando de lado el castellano -español- me parece suicida". (Lo de español lo añado yo. Así se conoce nuestro idioma en todo el mundo y no por castellano)

Si no he entendido mal, ojalá que si, pretendes decir que los idiomas autonómicos deberían aprenderse en el resto del estado -España se llama esta figura- dado que estado es el conjunto de instituciones que permiten la gobernabilidad de un país: Ministerios, delegaciones de hacienda, seguridad social, diputaciones, etc... Pero la palabra estado nunca puede sustituir a España. Ya se que está de moda prescindir de España para definirnos como nación al igual que se dice ciudadanos-ciudadanas, españoles-españolas, vascos y vascas, panolis y panolas, miembros y miembras...

No Merche, no faltaría nada más que en Sevilla, Murcia, Madrid, Cáceres, etc... se tuviera que aprender catalán vasco, gallego y valenciano.

Otra cosa diferente, probablemente lo que tú has querido decir, es que en las Comunidades Autónomas con idioma propio TAMBIÉN se enseñe, voluntariamente, digo VOLUNTARIAMENTE, el propio y de ninguna manera sobrevalorado o impuesto contra el español.

Importa poco que se entienda, que tú y yo entendamos el catalán y el gallego, porque el primero está presente en nuestras vidas y el segundo, que no se ofenda nadie, es español mal hablado con mezcla de portugués. Pero el catalán en Sevilla, Madrid, Cuenca y resto de España, excepto en Valencia y Baleares, no lo entiende nadie y si es de Gerona o Lérida, menos aún.

Con respecto al que tú llamas Euskera y yo vascuence, no lo entienden ni es España ni en ningún otro lugar civilizado. Era la jerga de la gente del campo, de los caseríos de montaña, del pueblo sin formación...

Luego los inteligentes sucesores del impresentable Sabino Arana se fueron inventando país, idioma y raza.

¿Un poco duro mi post-comentario?

Al menos queda claro como pienso yo al respecto.

Besotes e incluso abrazos concupiscentes.

Juan Robles

Anónimo dijo...

Apreciado Juan,

Tengo que felicitarte, una vez más, por lo acertado de tu comentario... Impecable!

Suscribo al cien por cien tus palabras (incluído el añadir el valenciano como lengua oficial del 'Estado'/Nación España).

No sé si será el franquismo (soy tan joven... que apenas recuerdo. Coincidimos apenas 7 meses desde el día que nací, así que poco puedo aportar), pero como las comparaciones siempre son odiosas (y este caso no es una excepción), no compararé. Pero sí puedo decir que la falta de libertad, para todo aquello que no invada el espacio de libertad del prójimo, me parece más propio de régimenes totalitarios que de una democracia moderna. Y falta de libertad es la que existe hoy en varias comunidades autónomas, entre las que desgraciadamente se encuentra Cataluña a la cabezo, en todo lo relativo a la 'cuestión idiomática'. El Español no es que esté en peligro en Cataluña (un idioma que hablan más de 300 millones de personas no está ni estará nunca en peligro), pero sí está brutalmente marginado:
-La educación
-Las instituciones
-Los medios de comunicación
-El cine (mención aparte merece el capítulo del cine... según el conseller de turno, el doblaje es propio de países fascistas... y hay que tender al subtítulo... pues !?)

Decía San Ignacio de Loyola... 'en época de tribulación mejor no hacer mudanza'. A los políticos les da igual que estemos 'tribulando' como no se ha visto en la vida (no sólo en España, sino en el mundo entero) con esta crisis que nos puede llevar a la ruina... total... no es Carod el que paga de su bolsillo las embajadas... somos nosotros los que le pagamos los caprichos.

Los ciudadanos somos tontos. Lo demostramos cada 4 años.

Saludos,

Alvaro Brompton

Carlos Martorell dijo...

Juan y Alvaro:
Me encantan vuestros extensos comentarios. Muchas gracias!

Merche Pallarés dijo...

Mi admirado Juan Robles, cuando digo que las lenguas autónomas deberían aprenderse en el resto del país, se me olvidó añadir un detalle muy importante: para los que estén interesados en aprenderlas NO como obligación, por supuesto. Pero, quizá hay gente en Sevilla, Madrid o Cuenca que les interese aprender el catalán (discrepo lo del valenciano que ni es catalán ni español...), el euskera y mejor el portugués que el gallego... y veo bien que como la religión es optativa en los colegios, tambien lo sean estos idiomas. ¿Por qué no? Nunca está de más aprender. Seguro que tendríamos menos problemas lingüísticos... Las imposiciones nunca me han gustado, por lo tanto estoy de acuerdo contigo que en las autonomías no pueden ni deben obligar a estudiar en sus respectivas lenguas, obviando el español. Eso nunca.

No te indignes tanto conmigo, querido amigo, pero es bueno polemizar porque no todos pensamos igual... Muchos besotes, M.

Anónimo dijo...

Merche,
Mi indignación no era por tu comentario. Estos, simplemente, colmaron el vaso de las barbaridades que en la prensa del día y en otros "blogs" había leído y contestado con mi sincera y algunas veces cruda opinión.
Por ejemplo en “digital.com” y más concretamente en "batiburrillo.com" leí con gran indignación, ahí si, que José Luis Carod Rovira, o como se llame este individuo, aconsejaba -de momento solo era o es un consejo- "que en los comercios de Cataluña y sobre todo de Barcelona los empleados, encargados y propietarios solo usasen el catalán para atender a los clientes y los mismos tendrían que hacer el esfuerzo necesario para entenderlo y hacerse entender" (sic)

Solo un descerebrado ex seminarista puede pretender esta -perdonarme- gilipollez. Está el comercio en general como para dejar que un posible cliente se marche sin comprar por no hablarle en español, en inglés, francés e incluso por señas. Y según este inane personajillo solo deben ser atendidos en catalán. Otras lindezas de Montilla, de Puigcercós, del jardinero Benach -hoy nada más y nada menos que Presidente del Parlamento de Cataluña- pero su carrera política viene de la jardinería en Réus (¿?)

Y si finalmente leo tus siempre acertadas y cariñosas palabras con eso de que se estudie catalán en "el estado" (España) y que el catalán se entiende en cualquier otro lugar de este país -España- la gota colmó el mencionado vaso de mi contenida, es un decir, rabia.

Los comentarios que hago al increíble Enrique -Enric- Sopena en su blog, "elplural.com" o los que le dedico tanto a él como a María Antonia Iglesias en "batiburrillo.com" son venenosos y a mi juicio, digo al mío, absolutamente ajustados a sus necedades pesebreras del "Partido" al que se deben desde que Felipe González marcó un antes y un después en la política española. Hay que pensar que el tal Sopena, hoy republicano y creo que más que socialista, fue durante muchos años un seguidor de Monseñor Escriba y miembro del OPUS DEI. Pero en su alma albergaba la verdadera semilla del diablo que ahora no sabe como proclamar a los cuatro vientos, excepto en su aburrido y devaluado blog que Dios confunda y en las mal llamadas tertulias del "extraordinario moderador" Jordi González en ese bodrio de Tele 5 que se llama La Noria y en el que nunca falta la llamada y conocida como "la albondiguilla"", María Antonia Iglesias a la que hay que reconocer una extensa y bien confusa cultura política y una dialéctica y vocabulario propia de un camionero de la peor calaña. Y otro personaje nauseabundo -o a mi me lo parece- que encontramos, especialmente en 59 segundos de TVE es la mujer de Sopena, Margarita Sánz Diez que echa veneno cada vez que abre su bocaza.

Querido Carlos, de tu última entrada en "El observador solitario" relativo a "periodistas" invitados al pesebre de mi amigo Rabat del que soy además buen cliente, me permitiré pasarlo por alto sin acritud y por eso no digo ni palabra en el mismo. ¿Sandoval?, ¿Ima Sanchis? y la inmarcesible Estrella Salietti y compañía... Mejor estoy calladito y tampoco digo nada del servicio de catering de Cacheiro porque tú estas acostumbrado a divinas delicadezas y este grupo, ni en broma. Taberneros de primera y basta y sobra.

Un buen fin de semana a todos y que no se os pase que mañana es Santa Matilde y el domingo Santa Luisa. (Una Santa Luisa más) Que ambas os bendigan y un saludo muy cordial para todos.

Juan Robles

Anónimo dijo...

Gracias Alvaro Brompton por tus elogiosos comentarios aunque no soy capaz de ubicarte y seguro que nos hemos cruzado mil veces y hasta es posible que hayamos compartido mesa con maravillosas criaturas.
Lo que si creo recordar es que eres de los Brompton, multimillonarios fabricantes de las famosas bicicletas de igual nombre.
Te deseo una feliz fin de semana y ahora que debo empezar nuevamente a realizar ciertos ejercicios aeróbicos, no me vendría mal estrechar lazos y recuperar nuestra amistad y de paso me puedes conseguir un "bici" de las tuyas que me hablan y no acaban de las maravillosas prestaciones y confortable transporte en mano al plegarse impensablemente.
Bueno, un amigo más recuperado en este blog al que espero y deseo accedas con frecuencia.
Juan Robles